PÁGINA EDITORIAL

ACCIONES Y REFLEXIONES es un intento de comunicación, que pretende entablar un coloquio con quienes accedan a esta página, y estén de acuerdo o en desacuerdo con nuestros colaboradores que serán de dos tipos: uno, que descifrará con sus propias palabras y conocimientos las acciones de nuestra sociedad local, nacional e internacional y reflexionará sobre ellas frente a todos nosotros, asumiendo la responsabilidad de sus afirmaciones y otro, que nos proporcionará el material ya escrito que desde su perspectiva también reflexione sobre lo que hace la gente y sus consecuencias y quizá, sobre lo que se tiene que hacer para transformar nuestro mundo, para el bienestar de las mayorías sin importar raza, credo político y religión.
Este espacio de intercambio de ideas se hará público semanalmente los sábados y recibirá colaboraciones hasta el viernes a las tres de la tarde.
Quienes se involucren con ACCIONES Y REFLEXIONES, tendrán en todo momento el acceso de sus comentarios en www.accionesyreflexiones.blogspot.com y para cualquier duda personal o aclaración a los teléfonos celulares 2292460817 con el Lic. Raúl Martinez y/o al 2291094949 con José Luis Ruiz Rivero

domingo, 29 de agosto de 2010

LOS POR QUÉ DEL FORO CIVILISTA Por José Luís Ruiz Rivero

 Empezaré con un afectuoso saludo a todos los civilistas presentes antes de iniciar un breve recorrido por las fuentes que desembocan en esta importante reunión de ciudadanos preocupados por el incierto futuro de nuestra patria.

Así que para entrar en materia quisiera exponer lo que los Civilistas Veracruzanos consideramos, en sentido amplio, nuestro patrimonio, o sea, que todos los aquí presentes al igual que más de 100 millones de mexicanos, debemos entender y afrontar que nuestro patrimonio es todo lo que se encuentra en el territorio nacional desde la frontera norte hasta la frontera sur, y todo lo que se encuentre hasta doscientas millas de sus costas (islas, recursos marinos, etc.) y que comprende también al conjunto de costumbres, conocimientos y grados de desarrollo científico, económico, político, social, técnico y artístico, de todos los grupos sociales que lo habitaran antes y de quienes lo habitamos ahora y que tenemos la obligación de protegerlo y acrecentarte para mayor y mejor disfrute de las futuras generaciones de compatriotas.

En consecuencia, los mexicanos pobres y ricos y a partes iguales, somos dueños de todos los recursos naturales renovables o no, así como de todo lo que nuestros compatriotas han realizado y que se encuentra debidamente documentado a lo largo de nuestra historia como nación y que de diversas maneras han pretendido proteger todos los gobiernos que hemos tenido, incluido el de Maximiliano que no era nativo del país.

Pero hete aquí, que desde los últimos quince años del siglo pasado y con mayor embate en la primera década del presente, los gobiernos de nuestro país han hecho una gran acometida para desreglamentar la protección federal de nuestro patrimonio en beneficio de particulares que en la mayor de las veces representan capitales trasnacionales, los cuales desde siempre han pretendido explotar nuestro patrimonio en su beneficio.

Nuestros preocupados gobernantes difunden que conservar nuestro patrimonio es oneroso para el presupuesto del país, presupuesto que descansa en los impuestos que de una u otra manera pagamos todos los mexicanos y que por lo tanto no les afecta, porque solamente son administradores de lo que es nuestro, no de ellos.

El gasto público debe estar orientado a la investigación, mantenimiento y conservación de todo Lo que incida en el progreso y bienestar de los mexicanos y se necesita de muchísimos más recursos para dejar una ganancia no en pesos y centavos, sino en términos de educación, salud y seguridad, ya que al tener un conocimiento exacto de nuestra identidad y del porqué, en todas las épocas de nuestra historia ilustres mexicanos han dejado la vida en defensa de la libertad y en la construcción de nuestro progreso con dignidad, tenemos algo que debemos conservar a toda costa y que se llama Soberanía Nacional.

Los Civilistas Veracruzanos después de un análisis de la realidad de nuestro entorno cotidiano y la problemática que aparece en la situación nacional por las presiones internacionales producto de la pretendida imposición de un esquema neoliberal al cual solo los políticos y empresarios le ven los beneficios, porque la sociedad civil en su mayoría, no siente que sea beneficioso para todo el país, vemos que esa presión empuja a terminar de malvender lo que nos resta de patrimonio a todos los mexicanos en provecho de una escasa minoría.
Hemos dedicado muchos años en tratar de entender la situación política de nuestro municipio y de nuestro país, y hemos observado que los bienes públicos, esto es la riqueza social lograda por la lucha revolucionaria del pueblo por su mejoramiento colectivo en contra de los mezquinos intereses privados de siempre, se encuentran en serio peligro por los intentos privatizadores de los gobiernos municipal estatal y federal, quienes siguen fielmente los lineamientos del capital internacional, el cual pretende integrar las diferentes culturas en una gran civilización mundial con los recursos de todos los países y regida por unos pocos.

Sin embargo, no nos mueve el ánimo de agitar para un levantamiento popular a los ciudadanos que nos escuchen porque creemos que no es con caos y terrorismo como se puede mejorar nuestro diario vivir, sino exigiendo que así como cada vez se nos pretende obligar a pagar más impuestos y a cumplir con todas nuestras obligaciones constitucionales, se nos restituyan los derechos que nos han sido conculcados por quienes se han entronizado en el poder político de México por lustros. Ejemplos sobran pera baste uno que nos ponga a pensar a todos, si la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos dice casi textualmente que todos los ciudadanos tiene derecho a votar y ser votados, este derecho está actualmente conculcado por los partidos políticos, agrupaciones de personas que no representan el sentir de todos los mexicanos, que en la mayoría de los casos no sirven para nada y algunos de los cuales se han convertido en escandalosos negocios familiares subsidiados por cantidades millonarias que pagamos con nuestros impuestos.

Hoy, con mucha preocupación somos testigos de un absurdo y lamentable retroceso, aquél ansiado cambio hacia la democracia y hacia un País Libre con igualdad de derechos y deberes, con una mejor distribución de la riqueza, con un gobierno incluyente, con una ley digna para los indígenas, con un respeto hacia nuestras Instituciones, un País sin impunidad, sin corrupción, sin asesinatos políticos, sin masacres indígenas, sin despilfarro gubernamental, sin caprichos, sin imposiciones ni prepotencias, con libertad de expresión, parece estar cada vez más lejos.

Parece que hemos regresado al tiempo de las dictaduras y las represiones, hoy se pretenden reglamentar las marchas de protesta en sentido contrario a lo que específica nuestra carta magna.

Hoy, la prioridad de los gobernantes es el maquillaje y la bisutería, el festejo de moda en los Monumentos Históricos y Zonas Arqueológicas, la comercialización del Patrimonio Cultural, y peor, la Venta del País.

Hoy los sindicatos que nacieron a raíz de las luchas por mejores condiciones de trabajo en la fábrica textil de Río Blanco, Veracruz (condenada a ser completamente destruida porque un juez de dudosa honorabilidad no la considera monumento histórico), estos sindicatos que apoyaron la construcción del país después de la Revolución Mexicana, ahora le estorban a los nuevos gobernantes sin visión, pues robándole a la clase trabajadora sus conquistas sindicales, hay mayor producción y crecimiento en el producto interno bruto, por supuesto que desde el punto de vista de la neoéíite gobernante. No se necesitan tantos estudios para entender que sólo buscan su beneficio y el de sus amigos, no el del Pueblo que con el señuelo de un cambio para mejorar votó por ellos.

Hoy, los tiempos violentos nos indican que si no encontramos una salida decorosa para estos intereses en conflicto, en un futuro cercano tocaremos fondo, porque la tolerancia del pueblo se está agotando, su resistencia se mina y si es necesaria otra revolución que frene el despojo que hoy se está proponiendo, los millones de compatriotas que viven en la miseria y que no tienen absolutamente nada que perder porque hasta el derecho a la salud se les pretende negar, la volverán a hacer.

Los Civilistas Veracruzanos hemos visto desde el levantamiento de Chispas todas estas señales y estamos preocupados por la sistemática desaparición de las Instituciones que de diferentes formas defendían el patrimonio de la nación.

Por esto, hemos determinado iniciar un amplio proceso de comunicación, análisis y discusión dentro del espíritu civilista, invitando a los ciudadanos del municipio de Veracruz y municipios colindantes, a sus gobernantes, a sus representantes populares y a toda la sociedad en su conjunto, a una jomada de reflexión y análisis político de la situación que guarda el patrimonio común frente a los embates del neoliberalismo y la globalización, y sus repercusiones en el municipio libre, con el afán no del enfrentamiento y la confrontación, sino del intercambio de ideas y planteamientos de manera civilizada y democrática buscando con todos los veracruzanos el terreno donde puedan darse los necesarios consensos para enfilamos decididamente hacia un desarrollo sustentable en la economía, la política, lo social y lo cultural.

En función de lo mismo hemos considerado conveniente apoyarnos en personalidades de agrupaciones diversas, para que aporten su punto de vista y propuestas sobre la situación del patrimonio del municipio y del país, en un intercambio de ideas y búsqueda de líneas de acción comunes para contribuir a su defensa, para que este Primer Foro de la Sociedad Civil Sobre Municipio y Patrimonio resulte ilustrativo no solo en técnicas, tácticas y estrategias de resistencia civil, sino también en lo concerniente al conocimiento que reconocidos investigadores oficiales e independientes han recabado sobre cuál es el patrimonio de los mexicanos, quienes como y en qué lo han dilapidado y sobre todo, qué podemos hacer para no permitir por ningún motivo que quienes estén circunstancialmente en el poder continúen despojándonos de lo que aún queda al pueblo de México, y ese pueblo somos nosotros, le inmensa mayoría.
4 veces heroica Veracruz, a 4 de diciembre de 2003.

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